Page 10 - Calle Angosta Diario Número 09
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Actualidad de mor-
disquito: el rostro
oculto de Enrique
Santos Discépolo.
Viene de la página N° 9
que toma las promesas en serio y las reali-
za. Pero mientras se construye, vos seguís
amenazando con que ”el año que viene me
la vas a decir”. ¿Y qué te tengo que decir?
¿Qué el año que viene vas a estar mejor?”.
(Discépolo)
Y en otro dirá: “¿Por qué hablás si
no sabés? ¿De dónde sacaste esa noticia
que echás a rodar desaprensivamente, sin
pensar en lo irresponsable que sos y en el
daño que podés hacer? Estamos viviendo el
tecnicolor de los días gloriosos y vos me lo
querés cambiar por el rollo en negativo del
pesimismo, el chisme, la suspicacia y la de-
presión (…) usás los rumores (…) ¡la que se
va a armar!” . (Discépolo)
En el próximo diálogo va a poner
en evidencia a los sectores egoístas de la
Nación, que siempre andan buscándole la
“quinta pata al gato”. Dando importancia a
nimiedades para la crítica fácil, superficial. Tenías una patria como una rosa, pero esa aumentaron al triple sus jornales y lograron Resalta la nacionalización de sectores
Y compara estas actitudes con la impor- rosa no perfumaba tu vida sino que se estaba la dignificación del trabajo (…)Se acomodó estratégicos de la economía, fundamental
tancia del proceso en marcha entre las que deshojando en el ojal de los otros. Ahora la la salud y el bienestar general (…). para la independencia económica, la sobera-
destaca las nacionalizaciones realizadas. solapa de tus enemigos está vacía y la rosa nía política y la justicia social, así: “El fruto
Así sostiene que “resulta que antes no te es tuya, ¡pero vos seguís como enquistado También Discépolo llama la atención irá primero a tu mesa y luego entrará en los
importaba nada y ahora te importa todo. en una terquedad sin belleza y sin sentido! acerca de una cuestión que siempre aparece ferrocarriles —¡tuyos!— y se detendrá en
Sobre todo lo chiquito (…) y te encontraste Aquello que antes te robaban y te negaban en los procesos económicos de crecimien- el hermoso puerto de los barcos —¡tuyos!”
con que te hacían el regalo de una patria ahora es tuyo, ¡todo!” . (Discépolo) to: la inflación, aquí Discepolín es didáctico (Discépolo)
nueva, y entonces, en vez de dar las gracias con su interlocutor:
por el sobretodo de vicuña, dijiste que ha- Volverá a cargar contra los que siem-
bía una pelusa en la manga y que vos no lo Mordisquito “Te oigo decir, por ejemplo: “¡Eh, ya pre buscan el lado malo, tienen una mirada
querías derecho sino cruzado. ¡Pero con el En la novena audición radial Discépo- no se puede comprar nada. Todo aumenta. superficial: “Dejáme que te cuente, Mor-
sobretodo te quedaste! (…) lo va a inventar un personaje: “mordisqui- Todo sube! ¡No sé a dónde iremos a parar!” disquito, porque esto le pasó a Pepe —un
Y protestás. ¿Y por qué protestás? to”, el prototipo del opositor. Acerca del Y tu frase tiene la apariencia de una sen- amigo— y Pepe se parece mucho a vos.
¡Ah, no hay té de Ceilán! Eso es tremen- nombre que elige para su interlocutor en los tencia (…) Pero hacéme un favor, ¿querés? Fuimos él y yo al circo y empezó el número
do. Mirá qué problema. Leche hay, leche diálogos radiales, puede relacionarse con lo Agarrá un lápiz y un papel. Te quiero ha- de un equilibrista. ¡Descomunal el equili-
sobra; tus hijos, que alguna vez miraban que años atrás, en 1947, había dicho: “los blar con cifras para no hacerla larga. Te- brista! Se subía a una escalera parada de
la nata por turno, ahora pueden irse a la hombres se dividen en dos grandes grupos: nés razón. Sí, el costo de la vida aumentó punta y al llegar allá arriba ponía un ban-
escuela con la vaca puesta. ¡Pero no hay té los que muerden y los que se dejan morder” un 113% con relación a 1946. Pero, ¿sabés quito, sobre el banquito un tarro de yerba,
de Ceilán! Y, según vos, no se puede vivir (Discépolo), y él nos dice que “más de una en cuánto aumentaron los salarios obreros? después del tarro un asiento de bicicleta,
sin té de Ceilán. Te pasaste la vida toman- vez hubiera querido ser malo, de estafado En un 172,8%. Y bueno, hacé la cuenta”. ¡también haciendo equilibrio el asiento!
do mate cocido, pero ahora me planteas perpetuo pasar a estafador, de hombre mor- (Discépolo). Y allí se sentaba él, y mientras la escalera
un problema de Estado porque no hay té dido a hombre que muerde. Pero nunca pude daba vueltas sobre sí misma este bárbaro
de Ceilán. Claro, ahora la flota es tuya, hacerlo”. (Discépolo). También comenta en relación a los hacía juegos malabares con tres botellas
ahora los teléfonos son tuyos, ahora los fe- porteños y su “porteño-centrismo”, a la vez en las manos, con los dos pies tocaba el
rrocarriles son tuyos, ahora el gas es tuyo, También se puede hallar ligado a la que pone de relevancia las quejas de los arpa, ¡y, claro, todos aplaudíamos como
pero…,¡no hay té de Ceilán!”. (Discépolo) idea del “prototipo del opositor recalcitrante sectores medios y acomodados a que otros locos! ¡Figuráte! ¡Un número estupendo!
que nada ve, ni nada quiere aceptar y que sectores sociales accedan a mejores condi- Pero Pepe movió la cabeza como la movés
En otro va a poner en consideración muerde incesantemente al gobierno con su ciones de vida, “ocupen” sus espacios: vos, ¿y sabés qué dijo?: “Sí, bueno, ¡pero
la dignificación del trabajador en el peronis- rumor chiquito, con su calumnia barata, con el arpa no la toca bien!”.
mo, por lo que critica a los que sostienen su crítica enana”. Ahora en los diálogos le “La geografía de tus sentimientos ter-
que: “Ahora uno llama a un electricista y, va a hablar a él, en esta ocasión acerca de la minaba en la avenida General Paz (…) ¿sa- Discépolo hablaría al pueblo durante
para colocar un enchufe miserable, te cobra idea del “acomodo” que siempre se echa a bés lo que decís ahora?: “¡Ah, en Buenos treinta y siete noches, luego, pedido de la
quince pesos. ¡Yo no sé adónde vamos a pa- rodar en relación a los gobiernos nacionales Aires ya no se puede comer! Vas a cualquier audiencia retomaría las audiciones por tres
rar!» A ningún lado. ¿Por qué? Si ahí está tu y populares: restaurante y no hay mesa. Están repletos. noches más, ya cerca de las elecciones dirá
error. Es que ese enchufe miserable, como Tenés que esperar turno. ¡Hasta para comer acerca de los candidatos de la lista oposito-
era miserable la situación de ese electricis- “Para vos todos los que comprenden hay que hacer cola!”. (Discépolo) ra al peronismo: “Sos el pasado que quiere
ta, ya no lo son. No hay nada miserable ya. que el país transita un destino de bienestar y volver por amor propio, sólo por amor pro-
Todo ha adquirido dignidad (…) hay algo de justicia están acomodados. ¿Y sabés una No va a dejar de resaltar el papel de la pio (…) ¿Y sabés por qué? Porque tu idea
que no se puede negar: la evidencia” (Dis- cosa? ¡Sí! Tenés razón (…) Desde los pibes, dignificación de la mujer en el nuevo proce- y yo sabemos que no debés volver. Y vos
cépolo). para quienes se viene construyendo una es- so, en relación a la desigualdad salarial con también, en el fondo de tu alma, aunque lo
cuela por día, para quienes se han organi- los hombres que iba emparejándose: “Mu- escondas, sabés también que no debés vol-
Resaltará asimismo la relación con la zado campeonatos deportivos (…) también chos que subieron hasta la fortuna utilizando ver. Por decoro. Por recuerdo. Por historia.
situación de la Argentina de antes del pero- están acomodados los muchachos, aquellos como peldaños el lomo de mil muchachas ex- Sos la imagen del retroceso, de la injusticia,
nismo y la de durante: “Yo no te pido que que antes vendían diarios, que tienen aho- plotadas (…) Dignificando a la mujer, de re- del hambre, del entreguismo. El pueblo lo
inventes una escuela filosófica o que leas ra cientos de escuelas de enseñanza técnico bote mejoramos la dignidad de los hombres, sabe, porque lo padeció, que venís de viejos
a Einstein y te vayas a dormir con el teo- profesional y enseñanza universitaria gra- porque no me digas que el respeto hacia la partidos que nunca hicieron nada en benefi-
rema puesto. Yo te pido que abandones tu tuita. Y también se acomodaron los obreros, mujer querida —que es tu madre, tu novia o cio del pueblo que es la patria (…) ¡Vos go-
posición de terco y pienses… pienses en lo los laburantes de nuestra sufrida carga y tu esposa— no es respeto que se te ofrece a bernaste! ¡No una vez, sino varias veces…
que estaba pasando y en lo que pasa ahora. la clase baja de tu irreflexiva soberbia, que vos también. ¿Verdad que sí?. y mal! (…) No creas que no te oí; bien claro
10 Febrero 2022