La adhesión de Juntos por el Cambio a La liberta Avanza, produjo un movimiento política hasta en las comunidades más pequeñas del país. Nuestra provincia y nuestra ciudad no permanecerán ajenas a esto. Las fuerzas políticas que llevan a Milei a la presidencia, deben en Villa Mercedes intentar contener el impacto  la rápida disolución de Juntos por el Cambio. Con legisladores provinciales y concejales, aparte de otras intendencias en la provincia, cual será el rol que va a asumir esta fuerza política en una crisis terminal?.

Recordemos que en esta instancia del próximo 19 de Noviembre, el no participar positivamente del acto eleccionario impacta aún más en los resultados finales. En un rápido análisis no es difícil entender que, si los dos candidatos recibieran las mismas cantidades de votos, pero se achica la masa total de votos positivos, se estaría beneficiando el ganador de las generales del 22 de Octubre.

Esto complica más aún la tarea libertaria. En nuestra provincia, cuales son los referentes políticos liberales que van a consensuar con los integrantes de Juntos por el Cambio? En Villa Mercedes? Que rol cumplirán los legisladores respecto de a quién votar? Quien será el encargado de organizar la fiscalización de los votos libertarios?.

Para aspirar a llevar a Milei a la presidencia, La libertad Avanza debe promover el VOTO POSITIVO, ya que solo eso es lo que le es útil. El ciudadano enojado que no va a votar, está achicando la masa total de votos positivos. La “libertad de acción” puede ser un discurso de los primeros días luego del resultado electoral, pero ya suena a una tibieza que el propio Macri se va a encargar de ir elevando en temperatura poco a poco. A tener ojo con eso.

En tanto en el oficialismo, la Juventud Peronista con un acto en San Luis ya puso primera y sale a la cancha. El resto del peronismo oficialista está activo ya que los gestos de Alberto Rodriguez Saá a Sergio Massa son más que evidentes. Replica el gran acuerdo nacional propuesto por el candidato presidencial y expone a la oposición sanluiseña en su falta de representación real de los sentires de las mayorías. El peronismo local, los sindicatos, las agrupaciones y los militantes, han retomado cada uno a su manera la militancia con optimismo. Todo esto en una situación quizás inesperada a razón de las dificultades que enfrenta el gobierno peronista. Pero más allá de estas cuestiones, en todo el país el peronismo ha vuelto a poner a una oposición atada con alambres en una situación incómoda.

Para las grandes fuerzas políticas con representación legislativa e institucional de nuestra ciudad, 37.899 ciudadanos, el                 46,36% del padrón, le dijo algo a la dirigencia “intermedia”, a la representación comunal de un lado y del otro de la grieta. Estos números son promedios incluso vemos que esta adhesión es mayor (53,88%) en Barrios populares como La Ribera.

Son muchas las cosas en juego. Las definiciones de los dirigentes nacionales cada día tienen mayor impacto en la política local hace rato. Una característica del nuevo escenario provincial.

Este mundo, esta sociedad argentina, las personas y a veces las propias familias, están tan materializados, que hipócritamente llevan una doble vida porque no se puede, no se resiste, vivir sin alguna autenticidad. “¿Quién le da una piedra a su hijo si les pide pan? ¿O una culebra si le pide pescado? (…) Si Ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos…”

La llamada capital del peronismo, Villa Mercedes, solo obtuvo poco más del 23 por ciento de los votos en las elecciones presidenciales de ayer. Algo no anda bien entonces.

“La capital del peronismo” fue nuevamente ungida Villa Mercedes en la voz de Alberto Rodríguez Saá, en uno de los últimos actos políticos que lo tendrán investido como primer mandatario provincial. Lo hizo en un marco acorde; un acto de campaña bien peronista, con la presencia del candidato presidencial Sergio Massa.