Los taxistas ocuparon la puerta del edificio legislativo y presentaron un proyecto en la mesa de entradas con la intención de prohibir la actividad de Uber.
Tras la sesión, los taxistas se reunieron con los concejales que forman parte de la comisión de Transporte, y les transmitieron su preocupación. Los concejales informaron que existe una ordenanza municipal que regula el sistema de transporte público y que se establecen multas y arrestos para aquellos servicios que no estén habilitados.
Los taxistas solicitaron formalmente a la Municipalidad que realice controles para verificar el cumplimiento de las regulaciones y anunciaron que, según la evaluación de las inspecciones, determinarán cómo continuarán con su reclamo.
A pesar de que no estaba previsto que se tratara ningún tema relacionado con Uber en la sesión del Concejo, los taxistas lograron una reunión con los concejales, quienes expresaron su apoyo a su reclamo.