El incidente generó forcejeos y denuncias de agresiones entre los manifestantes y los opositores, quienes llegaron a la entrada del campus exigiendo la reanudación de las clases.

Desde el lunes por la noche, estudiantes y docentes llevan adelante una toma pacífica de 48 horas en varios edificios de la UNSL, en protesta por el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario. La toma, que estaba prevista para finalizar este miércoles a las 20 horas, se desarrollaba en un clima de tensión por la proximidad del paro nacional docente y no docente convocado para el jueves.

Sin embargo, la situación se tornó violenta cerca de las 17:15 horas cuando un grupo, compuesto en su mayoría por estudiantes que rechazan la toma, intentó ingresar al edificio de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias (FICA). Los que se encontraban dentro del recinto denunciaron que los opositores llegaron de forma violenta, algunos con el respaldo de un "barrabrava" de un club de fútbol, lo que exacerbó los enfrentamientos.

"Vinieron con la intención de agredirnos", comentó Micaela, una estudiante que participa en la toma. Según su relato, el grupo que intentó ingresar golpeó a varios compañeros y hasta derribó a una profesora que participaba en la protesta. En los videos difundidos en redes sociales, se puede ver cómo en un momento uno de los opositores llega a levantar un escritorio en medio del caos.

El enfrentamiento ocurrió minutos antes de una asamblea interclaustro programada para las 18 horas, donde se decidiría si continuaba la toma. Los estudiantes que intentaron ingresar exigían el regreso inmediato a las clases, preocupados por el cierre del segundo cuatrimestre, mientras que los manifestantes dentro del edificio defendían su derecho a protestar pacíficamente en reclamo de un presupuesto universitario acorde y la defensa de la educación pública.

El conflicto en la UNSL se enmarca en un escenario nacional más amplio, donde universidades de todo el país han tomado medidas similares en rechazo a la política de financiamiento del gobierno. El veto presidencial fue respaldado por legisladores de La Libertad Avanza, el PRO y algunos miembros del PJ y la UCR, incluidos representantes de San Luis.

Con la situación aún tensa y la asamblea interclaustro en curso, se espera que en las próximas horas se decida si la toma continúa o se levantará, mientras crece la preocupación por la escalada de violencia en los campus universitarios.