Es conocido en su barrio por su labor de recolección de basura y transformación de los desechos en obras de arte.

Acompañado de un carrito, recorre las calles de Villa Mercedes para recolectar los residuos que la gente deja, no solo con el propósito de venderlos, sino para darles forma y crear artesanías. Una de sus obras más llamativas es un dibujo de una cancha de fútbol que él mismo diseñó hace 5 años, utilizando alrededor de 12.500 tapitas de botellas. También ha creado un dibujo de la silueta de la provincia de San Luis con sus divisiones políticas, utilizando la misma técnica.

Víctor vive en la casa que heredó de su abuela, ubicada en el Barrio Aviador Origone. La casa está pintada de colores y en la parte superior de la vivienda, ha rellenado las paredes con botellas, dándole un aspecto único y llamativo.

Para Víctor, los artículos que la gente desecha como basura son un tesoro. Ha construido una cascada de piedras en una de las paredes de su taller y guarda todo lo que le llama la atención y tiene colores. Su objetivo es que su vivienda sea un espacio para ser admirado, no solo un museo de cosas, y ha creado elementos como un piso de tapitas y una cama de botellas.

La creatividad de Víctor no está limitada por la falta de recursos. Él utiliza su imaginación para transformar los materiales y tener una perspectiva de vida maravillosa. Su labor artística no solo le brinda satisfacción personal, sino que también inspira a quienes lo conocen y aprecian su trabajo.