Si bien las variaciones porcentuales están condicionadas tanto por las diferentes bases de comparación (las restricciones a la actividad por la pandemia no tuvieron un impacto uniforme en todo el territorio nacional) como por la estructura ocupacional en cada caso (las provincias del Norte Grande son las que tienen la menor proporción de empleo registrado en relación con su población), el dato de Catamarca no deja de ser llamativo, ya que también se despegó de provincias de características similares.

Para Lisandro Álvarez, ministro de Industria, Comercio y Empleo de la provincia, el crecimiento en la creación de empleo privado registrado es el resultado de «un paquete de herramientas» que aún se encuentra en pleno desarrollo, y en el que confía para «cambiar la matriz energética y productiva» y de esa manera «lograr la preponderancia del empleo privado por sobre el estatal», una de las asignaturas pendientes de las provincias del NOA.

En declaraciones a Télam, Álvarez indicó que en Catamarca «no hubo demasiada pérdida de empleo en la pandemia» en comparación con otras provincias, pero que en la administración del gobernador Raúl Jalil «veíamos la posibilidad de una reactivación y actuamos en consecuencia».

«Creíamos que todo lo que se iba a generar iba a ser crecimiento y lo queríamos generar en blanco, teníamos miedo de que fuera en negro o ‘gris’, señaló al referirse a la estrategia utilizada a partir de junio de 2020, cuando el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) comenzaba a flexibilizarse paulatinamente.

Al respecto, se dispuso «una modificación en la ley de Promoción Industrial, con más exenciones impositivas por 15 años» y «líneas de crédito a tasas negativas», tanto desde la provincia como a través de convenios con el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación.

Pero para Álvarez «lo más importante» fue el lanzamiento de un programa de fomento al empleo privado, con subsidios equivalentes a porcentajes decrecientes del Salario Mínimo, Vital y Móvil por dos años, ajustados con periodicidad semestral.

«Por cada empleado nuevo ingresado, el Estado subsidiaba a la empresa contra la presentación del formulario 931 de AFIP (certificado de contribuciones y aportes)», indicó.

La primera evaluación da cuenta de la creación de 4.000 empleos nuevos netos en la comparación interanual, para una provincia con una población estimada en unos 420.000 habitantes y una relación de 72 asalariados registrados cada mil habitantes.

Álvarez detalló a Télam que «los sectores que dominaron fueron la industria y la construcción a través de la obra pública y la minería», mientras que «en la última etapa de 2021 vemos un levantamiento en comercio y en servicios».

«A esto debemos agregarle un programa para los sectores de confección y calzado, por el que la Nación incentiva la radicación de empresas», indicó, a la vez que destacó que con esa iniciativa «ya se han concretado varias inauguraciones».

Las más destacadas son la de Indumentaria Catamarca, el primer pool de cinco marcas (Billabong, Gepetto, Grisino, Jazmín Chebar y Azzaro) «que comenzó con 60 empleados y ya tienen 120»; y la de Textilcom, «que va a producir para las marcas Cheeky y Puma», señaló.

Por último, la minera china Zijin Mining Group inició la construcción de una planta de carbonato de litio en el yacimiento Tres Quebradas, 170 kilómetros al este de Fiambalá.

En la presentación, se destacó que con una inversión de US$ 380 millones de la subsidiaria en la Argentina, Liex S.A., este proyecto creará más de 1.000 puestos de trabajo directos e indirectos.