Sábado, 23 Noviembre 2024

¡Despertémonos del sueño!

Publicado el Lunes, 20 Mayo 2024 13:54 Escrito por
sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes de despertar sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes de despertar Salvador Dali

En un País como el nuestro, si hay crisis socioeconómica y de gobernabilidad –como ahora- la situación requiere más credibilidad social que política. La desigualdad subsiste, es enorme, y la concentración de riqueza de las minorías sigue aumentando escandalosamente. Hay una impúdica, inmoral y frívola ostentación mientras hay gente que no tiene qué comer, que no tiene techo, ni trabajo, ni remedios.

La constante mentira y desinformación de gobernantes, medios y redes, genera una grieta cada vez más profunda entre los que en realidad tienen un poco más que otros, y los que cada vez tienen menos y absolutamente nada; y lamentablemente entre las protestas, ideas, creencias y políticas, aparece la lucha de pobres contra pobres. La polarización es social, más que política; con nefastas consecuencias para la convivencia. Entre los poderosos y los que gobiernan, no hay peleas; son intereses simulados.

Cuando la crueldad de la codicia y del poder no tienen límite, incierto es el futuro”

Tenemos que recuperar el sentido común, la racionalidad, el corazón solidario. Terminar con el fanatismo insultante que daña no sólo a nosotros, sino a toda la población, y no permitir que ni el odio y la burla del Ejecutivo, la desidia de la Corte Suprema y la pusilanimidad burguesa de nuestros legisladores y gobernadores, nos quiten las esperanzas y los sueños. Ellos están en su pequeño mundo que no sufre y donde no existe la realidad, mientras los poderosos dolarizan los precios de la comida, de los alquileres, especulan en el mercado financiero que los vuelve más ricos sin trabajar, destruyen Pymes, despiden trabajadores, y son avaros con los salarios y condiciones laborales, ante la permisividad de un gobierno que no los controla y destruye empresas públicas, hambreando a sus jubilados. No quieren ver, ni escuchar; se tapan los oídos al clamor de la gente.

Los diarios no hablan de nosotros”.

Nos imponen por TV la tremenda falacia de que la Justicia Social, el “populismo” como ellos lo llaman, los Planes Sociales, los subsidios y la ayuda a los más necesitados, son “pura perversión”, con “actores pagados” o “gente extorsionada” que sale por los medios o a las marchas de protesta, entre tantas de las acusaciones verdaderamente perversas hacia la gente.

Desde cuándo ayudar a los necesitados, proteger al Pueblo, cuidar de los enfermos, hacer justicia, darle el merecido salario a los trabajadores y a los jubilados es perversión?

¿Hasta cuándo permaneceremos indiferentes, hipócritas, cobardes como ellos, mirando al costado para no ver el sufrimiento del prójimo?

Decir que nada podemos hacer, es pura mala fe. La indiferencia, justificar o simular de que no pasa nada, de que “hay que esperar”, “respetar la voluntad popular”, que seguramente “son peronistas, socialistas, comunistas, resentidos”, etc., muy parecido al dicho hipócrita de “algo habrán hecho”, convirtiendo a las víctimas en victimarios… ¿No es complicidad con el mal? ¿Es útil acaso, buscar explicaciones y elucubraciones sobre lo que ocasionó la llegada de este gobierno, buscar chivos expiatorios, acusaciones mutuas, cuando hay alguien, siempre, ahora y mañana, que golpeará a nuestra puerta pidiéndonos ayuda y nosotros… nada? ¿Colas interminables de gente para comedores, y nosotros… nada? Pagos puntuales a deudas externas ilegítimas, relaciones carnales con tradicionales opresores extranjeros, resignando soberanía y neutralidad…  ¿Y nosotros nada? ¿Necesitamos la reconvención del buen samaritano?

La situación es angustiante; la gestión en todas las áreas de la Nación está paralizada. ¿Dónde hay producción? ¿Dónde crecimiento? ¿Dónde trabajo? ¿Dónde mejora de la calidad de nuestras vidas? ¿Cuándo vamos a dejar de apostar como en la lotería a gobiernos que no logran estabilidad económica y política para el bienestar de todos, si es responsabilidad nuestra construir desde la base gobiernos mejores? ¿Hasta cuándo vamos a tolerar a los grandes grupos monopólicos nacionales y extranjeros del campo, la industria y las comunicaciones que jaquean permanentemente a los gobiernos y que nuestros gobernantes consienten u obedecen?

Este es un gobierno inhumano. Por su explícito y descarnado abandono. Por su desprecio al Pueblo. Un gobierno sin sensibilidad, que no le importa la gente. La mentira sin tapujos, la proclamación pública del delito, el insulto, la brutalidad, el anti humanismo, la libertad de las armas, el protocolo de arriar a la gente como animales y reprimirla, todo eso constituye su propia y fantasiosa realidad, que no es la realidad de un gobierno sabio, justo y responsable que ama y se debe a la gente; que es esperado por la gente.

No obstante, contra lo acostumbrado, si hay que resistir, que no sea pasivamente; pero tampoco con violencia, odio, escraches, insultos, defenestración o burla, porque allí donde ponemos el corazón, está lo que haremos con el otro.

Sí, en cambio, ejercitar una Democracia Combativa, que justamente es la que tenemos que ejercitar y actuar.

No se puede ser como los que nos hacen daño. Si no ¿Qué esperar de nosotros? La palabra siempre es acción. Y ésta debacle inmoral se expresa en el lenguaje bajo y sucio que tienen tanto los que nos gobiernan como los políticos en sus debates.

Despertémonos del sueño, ya hemos dormido bastante.

 

Visto 3465 veces

Calle Angosta | Periódico Digital. Publicación digital con artículos de interés en diversas temáticas, con selección de textos, imágenes, audios y vídeos.

Archivos de programas