Desde la asunción del nuevo gobernador Claudio Javier Poggi se entrecruzan versiones sobre si el dinero para afrontar esos compromisos del Estado Provincial están o no disponibles. En sintonía con la Casa Rosada, el actual mandatario repite como mantra la frase "no hay plata". La gestión saliente responde con contundencia, cifras y números de decreto, identificando cuánto y en donde se encuentran los billetes que los actuales funcionarios dicen que no encuentran.
Policías, maestros, médicos y enfermeros, entre otros y mientras tanto, recuerdan con saudade* esos tiempos no tan lejanos (el mes pasado, sin ir más lejos... y los meses inmediatos anteriores) en que la duda que les invadía era de cuánto sería el porcentaje de aumento que daría "el Alberto" para que no se escapara la inflación.
Aquí les dejo algunas placas con las que se comunicaban esas buenas nuevas... no pongo más para que las lágrimas no les estropee el celular o el teclado de la compu...
Un poco por experiencia y otro por inferencia, la presunción que sobrevuela es que el actual ocupante del sillón de Justo Daract está sobreactuando la situación. Los motivos posibles son diversos, concomitantes y no contradictorios.
Venganza
En 2011 Claudio Poggi recibió los atributos del poder de manos de Alberto Rodríguez Saá. Igual que en este 2019. Alberto hostigó la gestión en cuánto dobló el codo de la mitad del mandato: a partir del tercer año y desde su programa de radio que emitía desde el planeta Xillium, fue implacable con su predecesor. Predecesor que también sería su antecesor, porque en 2015 le imposibilitaría la reelección al cordobés (todo esto al interior del mismo peronismo, recordemos que hasta entonces compartían el mismo partido/frente político). Una vez que ARS volvió a la gobernación, continuó con los cuestionamientos a la gestión del contador: que se fumó el Fondo Anticrisis, que los autos blindados, que compró medicamentos para dejarlos vencer...
La "aparición" de vehículos que habían sido cedidos en corralones municipales, o el "descubrimiento" de vales de nafta con la alharaca más adecuada al festejo de un gol en una final mundial, abonan esta teoría. Que se consolida aún más en quien conoce la identidad de los "acusados" y los códigos con los que se suelen enviar mensajes "por elevación".
La hipótesis Claudio Kill Bill plantea que el oriundo de Alcira Gigena paga con la misma moneda en la que cobró esos destratos aquellos años.
Cuánto peor, mejor
Una técnica tan antigua como la injusticia: agravar artificialmente la situación para que un mal menor al amenazado sea percibido como un gran logro de la gestión.
El inesperado ocupante actual de la Casa Rosada lo está aplicando ad extremum. Sea por incapacidad, inexperiencia, falta de política o lisa y llanamente objetivos impúdicos e inconfesables (como que todas las medidas benefician a los ricos y poderosos) la situación se maquilla y enuncia como de extrema gravedad, insostenible y que requiere cirugía inmediata y sin anestesia.
Como asevera @rinconet con sabiduría zen "Nuestra derecha, hoy ultraderecha, nos suele prometer presentes calamitosos para lograr futuros venturosos y, al menos en parte, siempre cumple".
"Nuestra derecha, hoy ultraderecha, nos suele prometer presentes calamitosos para lograr futuros venturosos y, al menos en parte, siempre cumple".
Lo de la necesidad de un presente doloroso como condición para un futuro promisorio es un sofisma que se derrumba en cuanto le dedicamos 35 segundos de reflexión: "Son los famosos futuros venturosos que requieren de presentes calamitosos. Al parecer, para mejorar el nivel de vida de nuestros hijos, es necesario primero empeorar el de sus padres. El peronismo, más rudimentario e impaciente, considera que, al contrario, para mejorar la vida de los hijos lo mejor es empezar por mejorarle la vida a los padres. Sólo concibe futuros venturosos a partir de presentes también venturosos" (en entrecomillado también le pertenece a @rinconet. El texto completo se lee acá).
Distraer a la opinión pública para meter elefantes en el baño de Terrazas
Tergiversar los números también puede proporcionar justificativos para ejecutar acciones que de otra manera generarían rechazo social. Sin ir más lejos, el desdoblamiento de salarios estatales no sería posible sin machacar con el ya mencionado mantra "no hay plata". Claro que también ayudaron las campañas descalificadoras aplicadas sobre estereotipos de empleados públicos "a lo Gasalla", que pueden ser reales en una extrema minoría y excepcionalidad, pero de ninguna manera representan a la totalidad de agentes públicos que padecerán el desdoblamiento.
Otra vez, el modelo es copia o calco del que está desplegando el operador de motosierras instalado en Casa de Gobierno. En el caso nacional, la pirotecnia verbal (amplificada por los "medios" nacionales) esconde la brutal transferencia de recursos que se está produciendo desde las grandes mayorías populares a las acotadas minorías dominantes: "la casta", bah. Que, qué duda cabe, esta vez y como todas las veces que gobierna la derecha es la grandísima beneficiada por las políticas públicas de los gobiernos que controlan.
En el caso sanluiseño, la distracción vía empeoramiento de las condiciones realmente existentes parecen tener como objetivo la habilitación para el endeudamiento. Lo que pide Poggi es poder endeudarse en hasta seis veces el monto que recibe mensualmente por coparticipación (San Luis recibió durante este 2013 unos 474 mil pesos por habitante de coparticipación. Redondeando en que somos 500 mil sanluiseños es un total de 237 mil millones. Sin actualizar al 2024, ese monto divido por 12 meses y multiplicado por 6 que es lo solicitado por el Poder Ejecutivo Provincial, los sanluiseños nos vamos a empernar en -por lo menos- $118.500.000.000. Al mejor estilo Toto -El Messi de las Finanzas- Caputto. Si volvemos a dividir por 500 mil sanluiseños y sanluiseñas; sanluiseñotes y sanluiseñitos, vamos a deber, cada uno, desde Poggi en adelante, $237.000.
La respuesta del gobierno anterior
La respuesta del gobierno anterior comenzó a manifestarse cuando aún era gobierno. En efecto: aumentos mensuales empardando a la inflación, préstamos a tasa cero y continuidad de las obras públicas, incluso con adelanto de pago, aunque la nueva gestión pretenda descalificar, son medidas de solidez que comenzaron incluso antes de conocerse el resultado de la elección provincial (o sea: descarta la idea de plan de demolición para el gobierno entrante).
Y continúa después del traspaso de mando: con citas al Decreto N° 11.631-MHP-2023 y la aseveración de que "Hay Plata".
Mientras estas escaramuzas se producían en medios de comunicación (varios de ellos atendidos por sus propios dueños, jeje) se conoció una carta documento que envió el bloque de diputados del Frente de Unidad Justicialista con la firma de su presidenta, Claudia Pinelli, en la que intima a Poggi para que antes del 31 de diciembre realice el “pago de la totalidad de los sueldos de la Administración Pública provincial correspondientes al mes de diciembre 2023, absteniéndose de efectuar pagos parciales y/o en cuotas, en virtud de contar con los fondos suficientes conforme se encuentra acreditado en decreto N° 11631-MHP 2023”.
La demanda asegura que, en caso de “no cumplir dicha obligación”, la oposición “efectivizara la denuncia correspondiente por retención indebida de fondos”. En el Justicialismo están convencidos de que los fondos para pagar los sueldos de manera normal están en las cuentas públicas disponibles.