Hay que lograr comunitariamente, una mejor calidad de vida para la población de Villa Mercedes. Se hace imprescindible, en estos momentos de crisis donde se observa chatura en la ciudad, sin avizorarse horizontes de tranquilidad económica, salud, seguridad y progreso para la gente.  

En un País como el nuestro, si hay crisis socioeconómica y de gobernabilidad –como ahora- la situación requiere más credibilidad social que política. La desigualdad subsiste, es enorme, y la concentración de riqueza de las minorías sigue aumentando escandalosamente. Hay una impúdica, inmoral y frívola ostentación mientras hay gente que no tiene qué comer, que no tiene techo, ni trabajo, ni remedios.