El suministro de oxígeno estaba programado para durar 96 horas, y ahora los especialistas están considerando la posibilidad de cancelar la búsqueda. Las comunicaciones con el sumergible, llamado Titán, se perdieron dos horas después de sumergirse hacia los restos del Titanic, que se encuentran a casi 4.000 metros de profundidad y a unos 600 km de la isla canadiense de Terranova, en el Atlántico Norte.
A bordo del sumergible viajaban cinco personas, incluido el millonario británico Hamish Harding, el vicepresidente de Engro, Shahzada Dawood, y su hijo Suleman, el experto buceador francés Paul-Henri Nargeolet y Stockton Rush, director general de OceanGate Expeditions, la compañía que operaba el sumergible.
A pesar de los esfuerzos realizados, la búsqueda se ha enfrentado a numerosos desafíos debido a la remota ubicación y la gran profundidad del área de búsqueda. Aunque se detectaron ruidos bajo el agua que generaron cierta esperanza, su origen no ha sido identificado. La Guardia Costera de Estados Unidos y otros equipos de rescate han desplegado activos para tratar de localizar la nave y rescatar a las personas a bordo, pero la falta de oxígeno en el sumergible ha disminuido las posibilidades de encontrar sobrevivientes.