La estrategia financiera permitió una renovación del 138% sobre los vencimientos del día, generando un excedente de $1,59 billones que será depositado en la cuenta del Tesoro en el Banco Central. Según el Palacio de Hacienda, esta colocación busca reducir los costos de refinanciamiento y estirar los plazos de deuda.
Los títulos emitidos incluyen:
- Lecap con vencimiento al 16 de mayo de 2025, a una tasa mensual del 2,95%.
- Boncap con vencimientos en 2025 y 2026, con tasas entre 2,60% y 2,70%.
- Boncer ajustados por inflación, con rendimientos de hasta 8,50%.
El presidente Javier Milei elogió la gestión de Luis Caputo y destacó que, si la inflación se mantiene por debajo del 3% mensual, reducirá a la mitad la tasa de devaluación. Esto incrementará aún más la rentabilidad del carry trade, que en octubre permitió una ganancia del 11% en dólares.
Repercusión en San Luis
Para San Luis, esta política financiera nacional puede generar efectos mixtos. Por un lado, la mayor estabilidad macroeconómica y el fortalecimiento de la confianza en el peso podrían traducirse en una reducción de la presión inflacionaria, beneficiando el poder adquisitivo de los puntanos.
Sin embargo, los elevados rendimientos en pesos podrían desplazar recursos que podrían haberse destinado a proyectos productivos o de infraestructura en provincias como San Luis. Además, la política de carry trade prioriza el rendimiento financiero, dejando fuera del foco las necesidades concretas de las economías regionales, que requieren inversión genuina en sectores clave como la agricultura y la industria.
En un contexto donde la provincia enfrenta desafíos como el desempleo y la falta de inversión en infraestructura, el impacto de estas medidas dependerá de cómo se articule la política económica nacional con los intereses locales. Por ahora, las decisiones de San Luis en términos de finanzas públicas deberán alinearse cuidadosamente con las fluctuaciones que estas estrategias generan en el mercado nacional.