Dicen que el peronismo abandonó a los trabajadores y por eso ellos lo abandonaron. Pero habría que aclarar, con verdad, que fueron los dirigentes del peronismo quienes abandonaron a los trabajadores y las ideas del movimiento. No hay lugar para medias tintas. (“Abuelita, abuelita, ¿por qué tienes la boca tan grande?”, dijo Caperucita al lobo disfrazado).
Estimados compañeros y compañeras del movimiento peronista: siempre es un placer compartir algunos momentos de construcción de futuro en tareas políticas buscando caminos comunes. Sin embargo, las contradicciones secundarias se volvieron más importantes que las principales, y la lapicera volvió a manos de pocas personas.
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